Estamos ante un reto empresarial y social que nunca hemos vivido, por ello y desde la perspectiva empresarial, debemos ser muy consecuentes con las decisiones que adoptamos ya que nos van a marcar nuestro futuro, bien de una forma positiva en la que saldremos reforzados no solo ante nuestra competencia, sino también ante nuestros empleados, clientes, proveedores, accionistas… o bien de una forma negativa de la que posiblemente no se pueda salir y si se sale la travesía del desierto se puede hacer interminable.
Una de las labores más importante que tenemos que abordar ante una caída drástica de los ingresos, que en determinados sectores va a ser del 100% por la obligatoriedad del cierre, debe ser analizar y actuar rápidamente contra la estructura de costes que tiene la empresa con el objetivo de intentar mitigar las pérdidas que se van a ocasionar.
Pensando en qué gastos podemos minorar y que realmente produzcan efecto a corto plazo, como consejo y antes de que la situación se agrave más, hay que plantearse reducir gran parte del coste de todo trabajador que pueda ser prescindible si no tenemos actividad, por ejemplo; el que esté directamente relacionado con las ventas de la compañía (ej. camareros o cocineros en un restaurante, conductores en empresas de transporte….), o bien el exceso de gastos de personal de estructura (administrativos, recepción…), así como en cualquier otro departamento que podamos tener subactividad. Ante esta situación, que es la que estamos viviendo, podemos aplicar un ERTE, donde el trabajador pasa al desempleo. En este link del SEPE se detallan los trámites del empleado.
¿Qué es un ERTE? Expediente de Regulación de Empleo de carácter temporal (ERTE), a través del cual se solicita la aplicación de medidas para paliar una situación de dificultades surgidas en el seno de la empresa, ya sea por motivos internos y/o externos o como en el caso que nos ocupa ahora mismo, consideradas situaciones de causa de fuerza mayor.
Ante la posible orden y/o decreto de cierre y cese de actividades, las Empresas tienen la posibilidad de solicitar un ERTE para adoptar medidas de carácter laboral para reducir costes en este ámbito. Son dos las medidas que se pueden solicitar en el ERTE, pudiendo solicitar las mismas de manera conjunta, siendo estas las siguientes:
- Suspensiones temporales de contratos
- Reducciones de jornada
Con la situación actual, principalmente todos los ERTES que se presentarían son con motivo del COVID-19 y por tanto se fundamentaría en causa de fuerza mayor, y ello por la orden de cierre y cese de actividad, lo que supone que la tramitación del ERTE se simplifica a nivel burocrático.
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